

Continúa el fuego cruzado entre India y Pakistán tras los peores enfrentamientos en décadas
India y Pakistán continuaron el jueves intercambiando disparos de artillería en la frontera de la disputada región de Cachemira un día después de los peores enfrentamientos en dos décadas entre estas potencias atómicas vecinas.
Según los últimos balances de ambas partes, las hostilidades causaron al menos 44 muertos civiles, 31 del lado de Pakistán y 13 del lado indio.
El gobierno de Nueva Delhi también informó de un soldado fallecido por disparos pakistaníes.
Los bombardeos indios sobre regiones fronterizas de Pakistán y el fuego cruzado entre ambos ejércitos en Cachemira representan una grave escalada en la crisis entre ambos países.
Esta crisis comenzó el 22 de abril, con un atentado en la turística ciudad de Pahalgam, en la parte de Cachemira administrada por India, que mató a 26 personas, en su mayoría hindúes.
La región de mayoría musulmana está dividida entre ambos países desde la independencia del Reino Unido en 1947, es escenario de una insurgencia de rebeldes que piden la independencia o la anexión a Pakistán.
India, que acusa a Pakistán de respaldar estos grupos insurgentes, responsabilizó del ataque al país vecino y amenazó con una acción militar que se concretó el miércoles.
Su ejército aseguró haber destruido nueve "campos terroristas" en Pakistán con "ataques aéreos de precisión" en Cachemira y la región fronteriza de Punyab, donde vive más de la mitad de los 240 millones de habitantes del país vecino.
Poco después de esos bombardeos, los ejércitos de ambas naciones iniciaron un fuego cruzado a lo largo de la frontera en Cachemira que, según las fuerzas armadas indias, continuaron este jueves.
"El ejército pakistaní efectuó disparos no provocados con armas pequeñas y artillería" a los que "el ejército indio respondió de forma proporcionada", afirmó un comunicado militar de Nueva Delhi.
"Vamos a vengar hasta la última gota de sangre de estos mártires", prometió el miércoles por la noche el primer ministro pakistaní, Shehbaz Sharif.
Sus fuerzas armadas reivindicaron en la víspera haber abatido cinco cazas de combate indios en la parte de Cachemira administrada por Nueva Delhi.
Las autoridades indias no confirmaron oficialmente esas pérdidas, aunque una fuente de seguridad bajo anonimato confirmó a AFP que tres aviones militares se estrellaron en su territorio.
El bombardeo más letal de la aviación india impactó un seminario islámico cerca de la ciudad de Bahawalpur, en el Punyab. Según el ejército pakistaní, 13 personas murieron en ese lugar.
- Llamados a la moderación -
Hacía días que se esperaba una respuesta militar de India al ataque del 22 de abril, que no fue reivindicado pero que Nueva Delhi vincula al grupo yihadista Lashkar-e-Taiba (LeT), radicado en Pakistán.
La organización, designada como terrorista por la ONU, es sospechosa de unos atentados en 2008 en Bombay que dejaron 166 muertos.
India y Pakistán libraron múltiples guerras desde la partición e independencia de los dominios británicos en el subcontinente indio.
"El mundo no puede permitirse una confrontación militar entre India y Pakistán", alertó Stephane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU António Guterres.
El secretario británico de Comercio, Jonathan Reynolds, ofreció la mediación de su país para apoyar un acercamiento entre ambos países.
Estados Unidos, la UE, Rusia y Francia lanzaron también llamados a la moderación. "Quiero que se detengan" las hostilidades, declaró Donald Trump en la Casa Blanca.
El conflicto no se limita al terreno militar. Horas antes de los bombardeos, Modi dijo que su administración iba a interrumpir el flujo de agua de sus ríos hacia Pakistán. Islamabad respondió que consideraría tal medida como "un acto de guerra".
H.Kaur--MT