

La extrema derecha portuguesa supera un nuevo umbral en las legislativas
La extrema derecha superó el domingo el 20% de los votos en las elecciones legislativas portuguesas y se encuentra en posición de liderar la oposición al gobierno de derecha moderada de Luis Montenegro, que se mantiene en el poder aunque sin mayoría estable.
"La derecha radical va a adoptar una línea dura", predice el politólogo Antonio Costa Pinto, del Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad de Lisboa (ICS).
Montenegro, primer ministro de Portugal desde hace un año, ha rechazado gobernar con el apoyo de Chega ("Basta"), el partido de extrema derecha de André Ventura, que en su opinión no es un socio "fiable".
Sin embargo, la derecha moderada "se encuentra ahora en una encrucijada muy importante", porque podría verse tentada a desplazar esa "línea roja", considera Costa Pinto.
Según los resultados casi definitivos, la coalición de Montenegro obtuvo el 32,7% de los votos, frente al 28,8% logrado en marzo de 2024, cuando llegó al poder tras ocho años de gobierno socialista.
A la espera de que en los próximos días se asignen los cuatro escaños de las circunscripciones del extranjero, su Alianza Democrática (AD) aumentó su bancada parlamentaria hasta los 89 diputados, pero sigue sin alcanzar los 116 para la mayoría absoluta.
- Los socialistas, "decapitados" -
Chega, por su parte, mejoró notablemente su resultado, con el 22,6% de los votos (frente al 18,1% hace un año), mientras que el Partido Socialista (PS), que perdió por poco el año pasado, obtuvo esta vez solo el 23,4% de los votos, un fracaso que llevó a su secretario general, Pedro Nuno Santos, a dimitir el domingo por la noche.
El lunes, los dos partidos tenían 58 diputados. La asignación de los cuatro escaños correspondientes a los portugueses en el extranjero, podría definir cual es la principal fuerza de oposición.
Esos comicios históricos se celebraron un año después de la Revolución de los Claveles de 1974, que puso fin a 48 años de dictadura fascista.
El resultado del domingo "es una sorpresa, ya que ningún sondeo preveía un ascenso tan significativo de Chega, ni su hipotética ascensión al rango de segunda fuerza política", señala Paula Espirito Santo, del Instituto Superior de Ciencias Sociales y Políticas (ISCSP) de la Universidad de Lisboa.
Pero a pesar de esta nueva configuración, el futuro gobierno sigue "bloqueado", ya que "ahora que el PS ha quedado decapitado" difícilmente puede prever la formación de un "bloque central".
Tras beneficiarse de la abstención de los socialistas para aprobar los presupuestos del Estado para 2025, el primer ministro, Luis Montenegro, dimitió en marzo a raíz de unas sospechas de conflicto de intereses relacionadas con una empresa de consultoría registrada en su domicilio y a nombre de sus hijos.
- "Terreno resbaladizo" -
Antes de nombrar oficialmente al nuevo jefe del gobierno, el presidente Marcelo Rebelo de Sousa deberá realizar una ronda de consultas con todos los partidos que estarán representados en el Parlamento. El martes recibirá a las tres formaciones con más votos.
Sea cual sea el resultado de estas discusiones, la Constitución portuguesa no permite que se celebren nuevas elecciones generales antes de mayo de 2026. Hasta entonces habrá elecciones municipales a finales de 2025 y se elegirá un nuevo presidente a principios del próximo año.
En las calles de Lisboa, las opiniones estaban tan divididas como el próximo Parlamento.
"Este resultado muestra claramente el descontento de los portugueses con los sucesivos gobiernos de centroizquierda", que llevaban ocho años en el poder cuando ganó Montenegro en 2024, declaró a AFP Eduardo Carrilho, de 64 años, refiriéndose en particular al fuerte aumento de la inmigración en los últimos años.
Sin embargo, para Sergio Sales, un conductor de tuk-tuk de 44 años, el ascenso de Chega "es un paso atrás". "Estamos en terreno resbaladizo, y ya hemos cometido este error antes en nuestra historia".
N.Prakash--MT