

Sánchez y Starmer se reúnen en Londres para reforzar sus relaciones bilaterales tras el acuerdo sobre Gibraltar
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, visita este miércoles en Londres al primer ministro británico, Keir Starmer, con el objetivo de reforzar relaciones bilaterales tras la buena sintonía entre ambos por el acuerdo alcanzado en junio sobre Gibraltar.
Ese acuerdo prevé eliminar las barreras físicas y los controles de personas y mercancías en el paso fronterizo terrestre para acceder a Gibraltar, un enclave británico en la península ibérica.
En la reunión del miércoles Sánchez y Starmer hablarán sobre todo de temas comerciales, aunque podrían abordar otros asuntos como la situación en Ucrania y Gaza o la migración.
Reino Unido es el principal mercado de las exportaciones españolas fuera de la Unión Europea (UE) y el ejecutivo de Sánchez cree que es un buen momento para potenciar las relaciones económicas y empresariales.
En 2024 la balanza comercial fue favorable a España, que tiene a Reino Unido como su cuarto mayor inversor extranjero.
Se trata del primer encuentro institucional desde el Brexit, la salida de Reino Unido de la UE en 2020.
La visita de Sánchez es la primera de un presidente del Gobierno español a Downing Street desde la reunión de Mariano Rajoy con Theresa May en 2017.
La reunión bilateral llega tras el pacto del 11 de junio en Bruselas, en el que se acordó que todos los controles físicos en Gibraltar se llevarán a cabo en el puerto y el aeropuerto del enclave británico y no en su frontera terrestre, que diariamente atraviesan unas 15.000 personas, en su mayoría para trabajar.
En aquella reunión participaron los ministros de Exteriores británico y español, David Lammy y José Manuel Albares, el comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, y el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo.
De este modo, el territorio británico pasará a formar parte del espacio Schengen en libre circulación de personas.
Picardo, ministro principal del enclave, dijo estar "encantado" con un acuerdo "que brindará seguridad jurídica al pueblo de Gibraltar, a sus empresas y a todos aquellos en la región que dependen de la estabilidad en la frontera".
Además aseguró que "no afecta" a la soberanía británica sobre el enclave, que tiene unos 40.000 habitantes.
Ese acuerdo debe traducirse en un tratado vinculante, todavía sin fecha de implementación, que podría darse durante 2026.
"Beneficia a todos, y aportará certeza legal y confianza a personas y negocios de la región", dijo el comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic.
- "Un buen acuerdo" -
El acuerdo debe ser ratificado por España, Reino Unido y la Unión Europea.
Sefcovic dijo estar "convencido de que será ratificado, porque es un buen acuerdo".
El Ministerio de Exteriores español señaló que "el eje principal es garantizar la convivencia y prosperidad en la región. Con este objetivo se eliminarán la totalidad de las barreras físicas, cayendo la verja, la última barrera física que permanecía en el territorio continental europeo".
"En el ámbito de circulación de mercancías, se han fijado los principios que sustentarán la unión aduanera entre la UE y Gibraltar, que entrarán sin controles por carretera tras haber sido sometidos a las formalidades aduaneras en un puerto español", añadió el ministerio.
Pedro Sánchez mostró su satisfacción por el acuerdo.
"Después de tres siglos sin avances, la UE, Reino Unido y España cerramos un acuerdo global en beneficio de los ciudadanos y de nuestra relación bilateral con Reino Unido. Todo sin renunciar a las reclamaciones españolas sobre el istmo y la retrocesión de Gibraltar", expresó en X.
En un comunicado del gobierno británico, Starmer también mostró su satisfacción y reafirmó el compromiso del Reino Unido con la soberanía sobre Gibraltar.
El primer ministro británico destacó que el acuerdo "abre una gran oportunidad para impulsar las relaciones bilaterales".
F.Patel--MT